Ubisoft agrega a su gran y famosa saga de juegos el Assassin’s Creed: Origins donde Bayek (y su águila Senu) es el protagonista en el regreso de la franquicia de acción en mundo abierto.
El videojuego ha sido desarrollado por el equipo tras el estupendo Assassin's Creed IV: Black Flag pero esta vez agregando abundantes cambios jugables, con una experiencia más centrada en la naturaleza y con un cuidado e histórico retrato del antiguo Egipto ambientado exactamente en el año 50 antes de cristo y bajo el reinado de la emblemática Cleopatra.
Assassins Creed: Origins ha contado con una labor de desarrollo de cuatro años y las opciones de combate, así mismo, crecen de igual forma puesto que además de las habituales alternativas cuerpo a cuerpo, el héroe Bayek (que no es el único protagonista) cuenta con un escudo y un arco para defenderse, y una mecánica de lucha completamente remozada.
